Experimente la sensación especial de vivir directamente sobre y junto al agua y alquile nuestra casa flotante WILMA. En el Diamantgraben, un corto brazo del Elba. Déjese mecer por las suaves olas, tome el sol en cubierta, disfrute de las vistas, atrévase a saltar al agua y sienta la libertad a bordo de nuestra casa flotante. 28 metros cuadrados de espacio interior ofrecen espacio suficiente para disfrutar de un relajante descanso de la vida cotidiana. Dispone de baño y cocina americana, WLAN gratuito y admite mascotas.

Entrando por la puerta principal, se accede primero al cuarto de baño con un pequeño inodoro y una ducha grande. Desde allí se accede a la habitación principal con una cama (1,40 m de ancho, colchón cómodo), cocina americana y mesa de comedor.

La cocina, con placa de gas de 2 fuegos, fregadero y nevera pequeña, tiene todo lo necesario para cocinar, y a menudo se puede ver a los patos nadando por la ventana. Se proporcionan ollas, vajilla y cubertería.

La habitación principal se puede separar de la habitación delantera, el "salón", mediante una sencilla puerta corredera. Allí se encuentra el sofá cama (1,20 m de ancho) y las ventanas que van del suelo al techo ofrecen una hermosa vista sobre el agua a un lado.

La pequeña terraza contigua invita a desayunar, tomar café y relajarse, sobre todo cuando hace buen tiempo. Podrá mecerse suavemente en una silla colgante.

Además del cuarto de baño a bordo, hay otro cuarto de baño en tierra, a unos 40 m de la casa flotante, que también puede utilizar.

En el patio, por el que se camina hasta el embarcadero con las barcas, se construyen a mano casas flotantes de gran calidad con madera y según normas ecológicas. En el lugar se encuentran a menudo carpinteros y personas aficionadas a los barcos. No tiene por qué hablar con nadie, pero si quiere, puede entablar rápidamente una conversación. A veces se oyen ruidos de construcción. El entorno es muy verde, pero sigue siendo Hamburgo; hay un puente de ferrocarril cerca, que se oye con más o menos intensidad según la dirección del viento. (A la mayoría de la gente no le molesta el ruido).